En las últimas tres décadas, las nuevas tecnologías de información y comunicación han cambiado el mundo en forma radical, siendo el periodismo probablemente una de las profesiones más conmovidas y transformadas, ya que las técnicas de videoconferencias, la conversión digital del audio, el uso de los teléfonos celulares, las más sensibles grabadoras y las más sofisticadas filmadoras, entre otras maravillas tecnológicas, prestan ahora un concurso invalorable a lo nuevos comunicadores.